En un acto en el Teatro Odeon se dio cita a la sociedad civil, personal técnico y un representante de la Corporación Municipal para conversar de hacia dónde quiere encaminarse hacer compatible un nuevo modelo energético y la salvaguardia del territorio y su paisaje.
El modelo energético se ha abierto en debate en Albaida el pasado viernes al Teatro Odeon donde la Plataforma en Defensa del Territorio en la Vall d’Albaida junto con el Ayuntamiento de Albaida y expertos en energías renovables y otros colectivos con experiencia en la lucha por el territorio, se dieron cita con un auditorio repleto de personas interesadas en conocer los retos que suponen las macroplantas solares y las alternativas existentes . Una mesa redonda que sirvió para expresar las dudas que los proyectos solares plantean en Albaida, donde ya hay 10 peticiones de compatibilidad urbanística para desarrollar la actividad al término del municipio.
El pasado mes de julio la Plataforma y todos los grupos políticos del Pleno Municipal mostraron públicamente su posición contraria a la instalación de estos macroproyectos y se pactó una serie de acciones conjuntas para informar a la ciudadanía de lo que estos suponen. Fruto del entendimiento entre el colectivo vecinal y la corporación municipal intervino como portavoz del Ayuntamiento, el regidor de Urbanismo, Alejandro Quilis, quien hizo un resumen de la legislación vigente en la localidad, en el ámbito autonómico y estatal, así como, el por qué se ha puesto al término de Albaida en el punto de mira de las empresas de producción de energía solar. Una reunión que arrancó compromisos para la aplicación estricta del requisito del 3% recogida al Decreto 14/2020 de la Generalitat en todo aquello que dependa del Ayuntamiento de Albaida y poner a trabajar la maquinaria técnica del consistorio para solicitar la moratoria urbanística de un año.
Se espera trabajar en la misma dirección desde la ciudadanía y la corporación municipal para poder conseguir diseñar el modelo de transición energética que hace falta para frenar el cambio climático y que implica replantear todas las alternativas viables antes de afectar el Territorio de la manera que se plantea con las macroplantas solares que ahora mismo están sobre la mesa y que tengan presente una derivada social donde los beneficios se puedan sentir también por las familias que más lo necesitan. Al mismo tiempo que se impulsará sumar otras localidades hacia un nuevo modelo territorial más racional y justo.