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Los responsables de la corporación reúnen en sede provincial a más de 60 alcaldes y concejales de las poblaciones dañadas, junto a los técnicos que están trabajando en las tareas de emergencia y reconstrucción.
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Las primeras ayudas se destinan a carreteras; ciclo del agua, restauración de parques de bomberos; extracción de lodos; reposición de equipamiento informático y vehículos; y un fondo incondicionado de 15 millones de euros
La Diputació de València ha reunido este viernes en sede provincial a más de 60 alcaldes, alcaldesas y responsables locales de los municipios afectados por la DANA, más de la mitad de forma presencial y el resto online, junto a los técnicos de la corporación y de la Generalitat que desde el primer momento están trabajando para valorar los daños y repararlos lo antes posible. En palabras del presidente de la Diputación, Vicent Mompó, “se trata de sumar el esfuerzo de todos para dar la respuesta más rápida y efectiva a las personas que están sufriendo las consecuencias de la DANA, con unos daños estimados en infraestructuras y servicios de alrededor de 1.300 millones de euros”.
El líder provincial, acompañado por las vicepresidentas Natàlia Enguix y Reme Mazzolari, ha destacado que el objetivo de esta primera reunión presencial con los responsables de los municipios afectados, con los que la Diputación mantiene el contacto diario desde el inicio de la catástrofe, es “actualizar junto a los técnicos todas las medidas y contratos de emergencia que las instituciones hemos activado, resolver sus dudas y escuchar las necesidades que pueden ir cambiando cada día”. “Una vez dada la primera respuesta a esas necesidades básicas de auxilio, comida, suministro de agua y recuperación de la energía y las comunicaciones, entramos en una nueva fase en la que a todos nos preocupan asuntos como la extracción del lodo o la retirada de vehículos”, ha señalado Mompó.
En este sentido, los asistentes han recibido un documento con las actuaciones realizadas y en marcha, el funcionamiento de los programas y los contactos oportunos. “Es un documento vivo en el que os pedimos vuestra participación para que queden recogidos todos los daños y podamos actuar lo antes posible para resolverlos”. El presidente provincial ha hecho referencia a “la respuesta inmediata de la Diputación, que en estas semanas ha destinado más de 70 millones de euros a actuaciones de emergencia que son solo el principio de la inversión necesaria para devolver la normalidad a las zonas afectadas; un reto conjunto de todas las instituciones en el que la Diputació de València va a participar de forma incondicional estando al lado de los ayuntamientos con el respaldo económico, técnico y humano”.
Infraestructuras y Asistencia Técnica
El presidente ha introducido un encuentro en el que el protagonismo ha sido de los técnicos, tanto de la Diputación como del Consell. La vicepresidenta segunda, Reme Mazzolari, responsable de Infraestructuras y Proyectos Técnicos, ha desglosado brevemente la inversión de urgencia de la corporación provincial, con 25 millones de euros destinados a la reconstrucción de carreteras y puentes; nueve millones para infraestructuras en el ciclo del agua, extracción de lodos y la compra de vehículos municipales (más de una veintena de furgonetas y 4×4 en 19 localidades); un millón de euros para la reposición de equipamiento informático en los ayuntamientos; otro millón para la gestión de campas de seguridad en la que depositar los vehículos siniestrados; y 15 millones de euros para un fondo incondicionado que pueda destinarse a inversión y gasto corriente.
A estas cantidades, que suman 51 millones del remanente de la corporación de este mismo año, cabe sumar los 20 millones de euros que el Consorcio Provincial de Bomberos va a destinar a la restauración de los parques afectados, así como a la reposición de instrumental y herramientas de ciberseguridad.
El primer técnico en intervenir ha sido Jorge Gil, jefe del servicio de Asistencia Técnica de la Diputación. Ha explicado el sistema de evaluación de daños en equipamiento e infraestructuras realizado junto a la Generalitat, que ha permitido disponer de esa primera estimación de 1.300 millones de euros. Cada uno de los municipios afectados cuenta con una ficha en la que se recoge cada infraestructura o servicio dañado y se prioriza la emergencia para restaurarlo. “Primero hemos completado la foto fija de la situación y ahora necesitaremos documentos más precisos para empezar a intervenir”, explica el técnico, quien ha instado a los alcaldes y alcaldesas a seguir comunicando los partes y realizando sus consultas.
A continuación ha tomado la palabra el jefe de servicio de Carreteras, Javier Piedra, quien ha confirmado que “todas las obras de emergencia en las vías de la red provincial, un total de 37 contratos, han sido ya adjudicadas formalmente”. Desde el día siguiente a la catástrofe, el área de Carreteras que dirige Reme Mazzolari trabaja en la limpieza y reconstrucción de plataformas y en la reparación de los daños en 29 puentes que impiden la funcionalidad de la red viaria.
En este punto, la vicepresidenta Mazzolari ha destacado “el trabajo conjunto que los operarios de Carreteras realizan con la UME en la instalación y puesta en tránsito de puentes provisionales hasta que se puedan reconstruir definitivamente las infraestructuras”. “El Ejército monta las estructuras en tiempo récord y el área de Carreteras de la Diputación adecua el terreno y pone en servicio estos viaductos para restablecer vías de comunicación de gran importancia”, detalla la responsable provincial.
El principal problema ahora, según el técnico, “son las infraestructuras viarias de titularidad municipal, con quilómetros de caminos, puentes y pasarelas urbanas dañadas que hay que reponer a través de la coordinación y el trabajo conjunto de todas las instituciones”. En este sentido, la Diputación ha elaborado fichas de cada infraestructura con la evaluación de daños y el coste de repararlos.
Tienen prioridad uno los accesos a núcleos habitados, servicios públicos esenciales, transporte escolar y vertederos. Y prioridad dos, que no significa que sean menos importantes, los caminos agrícolas, forestales y de acceso a viviendas diseminadas. Un avance del inventario ya ha sido entregado a la Generalitat, que recibirá la actualización de las 181 fichas de 25 municipios en las próximas horas. De la reconstrucción de las principales infraestructuras municipales se hará cargo la Generalitat, salvo en el caso de Riba-roja, donde actuará la Diputación.
Agua y alcantarillado
En materia de agua y saneamiento ha tomado la palabra la vicepresidenta primera y responsable de Egevasa, Natàlia Enguix, quien ha cifrado en 500 millones de euros los daños provocados por la DANA en el Ciclo Integral del Agua de la provincia. Enguix ha destacado el trabajo de la empresa pública de la Diputación, que gestiona el servicio en ocho de los 78 municipios afectados “pero que se ha puesto a disposición de todos los ayuntamientos para atender sus necesidades y restablecer cuanto antes el suministro”.
Entre las cifras aportadas por la vicepresidenta destacan “el envío de cubas como suministro alternativo a 15 poblaciones, con un total de 650.000 litros de agua potable; las 1.500 horas extra realizadas por los operarios de Egevasa y su socio tecnológico Global Omnium para reparar fugas y averías en cerca de un centenar de municipios; los 140 camiones cuba empleados en la desobstrucción de las redes de alcantarillado; las 75 depuradoras que han empezado ya a repararse gracias al convenio con la EPSAR, con un coste global de 32 millones de euros; el control analítico del agua en más de 90 localidades, entregando los resultados a los ayuntamientos y a Salud Pública; y las 20 revisiones efectuadas con drones para detectar fugas y roturas en las infraestructuras dañadas”.
Enguix ha destacado algunas de las actuaciones realizadas de urgencia para restablecer un servicio básico como el agua, caso de la reparación de fugas en la red de acometidas de Catarroja; la reposición de la tubería del pozo desaparecida en Pedralba; los tres quilómetros de tubería para cruzar el río y reponer el servicio en Sot de Chera, con la ayuda inestimable de los vecinos del pueblo, o la puesta en marcha del antiguo pozo de Villar del Arzobispo para dar servicio hasta que se pueda restaurar el canal.
Vicente Fajardo, experto hídrico y representante del socio tecnológico de Egevasa en el Cecopi, ha completado el repaso a la afectación de las infraestructuras hídricas, agradeciendo la profesionalidad y la respuesta de los fontaneros de todo el territorio que se han desplazado a Valencia para ayudar tanto en el restablecimiento del servicio de agua potable como en la extracción de lodos. “El problema es de gran magnitud, y tras resolver el abastecimiento de agua en alta, que llegó a afectar seriamente a un millón de personas, ahora seguimos con los trabajos en acometidas rotas en viviendas, una situación compleja que requiere de cirugía a pequeña escala”.
El director de Global Omnium ha informado de que se sigue trabajando en los 15 municipios en los que el agua aún no ha sido declarada apta para el consumo, y ha cifrado la afectación del alcantarillado en 800 quilómetros. “Paiporta es el municipio más atascado, con un 40% de colmatación y el resto de la red en precario. Allí trabajamos entre 10 y 12 horas con los equipos a presión máxima, pero no resulta sencillo por el estado de la red y los pinchazos que sufren los camiones. Seguiremos actuando en todos los pueblos afectados según el grado de colmatación de la red”.
Lodos y retirada de vehículos
Varios directores generales del Consell han participado en la reunión convocada por la Diputación. El de Medio Natural, Raúl Mérida, ha explicado el sistema para establecer puntos de acopio en los pueblos afectados para recoger enseres, que posteriormente se han trasladado a puntos de transferencia y a su destino final en vertederos. “La primera necesidad fue la maquinaria pesada que nos pedían los ayuntamientos, y respondimos con un millar de máquinas como palas, cubas y retros, con otros mil operarios trabajando de forma ininterrumpida”.
Mérida ha avanzado durante la reunión que la Generalitat trabaja con el Ministerio en la tramitación para “disponer de un vertedero de emergencia en un antiguo hueco minero”. El coste global de la retirada de residuos puede alcanzar los 400 millones de euros, con un millón y medio de toneladas. “La prioridad ahora es eliminar los puntos de acopio local, recuperando cuanto antes la normalidad de ir directamente a los puntos de transferencia”, explica el director general, que agradece la colaboración a la Diputación y los ayuntamientos.
En cuanto a los vehículos que siguen amontonados en las zonas afectadas, el ejecutivo autonómico ha adoptado una solución transitoria mediante un contrato de emergencia para llevarlos a una campa grande fuera de los núcleos urbanos, en espera del real decreto ley del Gobierno central que declare los vehículos siniestrados como residuos urbanos y permita su retirada definitiva.
En este sentido, el jefe de servicio de Agua y Residuos de la Diputación, Juanjo Mayans, muestra su preocupación por la situación sanitaria y avanza los trabajos de retirada del lodo y los residuos en garajes y sótanos, en los que la corporación invertirá cerca de siete millones de euros. “Estos trabajos son fundamentales para la desinfección, incluyendo la reparación de las bajantes de pluviales afectadas”.
Voluntariado de funcionarios
Por su parte, el jefe de servicio de Presidencia, Javier Zamora, ha explicado el protocolo entre la Diputación y Cosital para que funcionarios de carrera y personal laboral fijo de los ayuntamientos puedan ofrecer sus servicios de forma temporal, un año más otro prorrogable, en los consistorios de los municipios afectados. “Existe demanda de informáticos, psicólogos, educadores y trabajadores sociales, entre otros perfiles. Es importante tener claro que esta opción del voluntariado está pensada para necesidades no permanentes y vinculadas a la reconstrucción, pues se trata de un programa temporal”, recuerda Zamora.
Por su parte, el responsable de Informática, José Benedito, ha avanzado que “en cuestión de días completaremos la distribución de material informático en los ayuntamientos afectados”. Un total de 41 municipios han trasladado sus necesidades a la Diputación, con la que mantienen el contacto permanente en cuestiones técnicas. La respuesta provincial se traduce en el envío de 450 ordenadores de sobremesa, 500 monitores, 200 ordenadores portátiles, 60 escáneres y otros dispositivos como impresoras y site’s.
Los alcaldes y alcaldesas presentes en esta primera reunión presencial tras la DANA han trasladado sus inquietudes y las necesidades más acuciantes de sus municipios en este momento, 24 días después de la riada. Coinciden en la urgencia de retirar el lodo y los vehículos de sus núcleos urbanos, y agradecen a la Diputación la proximidad y la respuesta inmediata que viene dando desde el primer momento.