El Ayuntamiento de l’Alcúdia de Crespins da un paso más en su estrategia para cumplir sus compromisos por el clima y la energía y pone en marcha un plan orientado a la mejora de la eficiencia energética y el control, seguimiento y evaluación de todas sus actuaciones que conforman este plan para su transición energética.
Cómo ha explicado el regidor de Medio Ambiente, Jordi Caparrós, con ImpactE como aliado estratégico y socio tecnológico, la empresa valenciana que permite evaluar, priorizar y planificar las estrategias de transición energética optimizando los recursos y maximizando los impactos mediante herramientas web para planificar y justificar de la forma más ágil las actuaciones del municipio en todas sus áreas de eficiencia energética, el municipio “contempla el despliegue de una red de instalaciones de autoconsumo fotovoltaico que permiten proveer al conjunto de los edificios públicos de la ciudad, así como el impulso de comunidades energéticas abiertas a la participación de hogares y pymes”.
Además, la tecnológica de ImpactE ayudará al seguimiento en tiempo real y justificación de todas y cada una de las actuaciones que el municipio lleve a cabo en su misión de cumplir con su cometido de descarbonización. Viendo como impactan cada una de sus acciones: social, económica y ecológica, esta herramienta permitirá justificar el progreso del Ayuntamiento respecto a los objetivos marcados en los PAUS (planes de acción para el clima y la energía sostenible).
El Ayuntamiento de l’Alcúdia de Crespins, según ha indicado Caparrós, ha encargado a ImpactE realizar los estudios técnicos sobre el potencial fotovoltaico de todos sus edificios públicos para poder detectar y priorizar las acciones más eficientes y sostenibles. En cada caso, se definirán indicadores como la capacidad de generación real, la inversión requerida, los ahorros estimados, el periodo de amortización e impactos en términos medioambientales.
A partir de los datos obtenidos, se definirá un plan del máximo ahorro energético con la menor inversión para instalaciones fotovoltaicas en edificios públicos, para el autoabastecimiento energético de todos sus consumos públicos. Además, se estudiará la puesta en marcha de comunidades energéticas, definiendo las mejores ubicaciones por potencial de generación y cobertura, inversión y retornos.